
La rabia es la emoción primaria que se encarga de desencadenar una respuesta de autodefensa cuando sentimos que corremos peligro. Podemos experimentarla hacia nosotros mismos- cuando cometemos un error-, o hacia los demás-cuando nos ofenden o violentan nuestro derecho al respeto.
La rabia descontrolada hacia los demás puede dar lugar a la ruptura de las relaciones con esa/s personas. Cuando eshacia uno mismo, podemos llegar a instalar en nuestra cabeza el sentimiento de culpabilidad y las consecuencias que esto conlleva.
El enfado, la impotencia, la cólera, odio, furia, resentimiento y rencor son algunas de las manifestaciones de esta emoción.Aceptarlas y gestionar las emociones primarias, nos ayudará a desarrollar lo que denominamos inteligencia emocional. Si quieres controlar tu rabia, tienes que conocerte bien.
Te invito a pensar en una situación que te saca de tus casillas y piensa en ¿qué es lo que te molesta tanto?, ¿por qué? Averiguacómo podrías anticipar tu enfado ¿qué síntomas previos recibes en tu cuerpo? Se trata de controlar la rabia antes de que te sientas enfadado de verdad. Cuando notes que empieza a molestarte esa situación, aun estás a tiempo de modificarla.
La forma de gestionar la rabia no es conteniéndola sino canalizándola para que no nos destruya. Si esperamos a estar rabiosos, será tarde emocionalmente porque ya estaremos involucrados y fuera del control racional.
El primer paso para canalizar la rabia es evitar la acumulación de pequeñas tensiones que puedan acabar en ira. Actúa anticipadamente, busca claridad para la situación y actúa desde la resolución del conflicto. Nadie gana una maratón sin entrenar. Aprender a gestionar la rabia lleva tiempo pero se puede aprender. Seguir alguna de estas pautas te ayudará:
– Identifica bien la situación. ¿Dónde nace? ¿cómo te hace sentir?
– Identifica con qué parte de tu cuerpo se relaciona.
– No necesitas alimentarla con puntos rumiativos. ¿para qué?
– Controlar la respiración es parte fundamental.
– Modifica los motivos. Estudia qué está en tu mano que pueda ayudarte a modificarlo.
– Busca sensaciones positivas.
– Recuerda que la ira, la rabia, la sientes tú, los demás no son causantes de ello, reflexiona que el que decide enfadarse por algo siempre eres tú.
Nuestro interés, tu bienestar. 692 99 44 11 info@zonabienestar.es
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